No conocia la existencia de este dia hasta este mismo dia a las 6.36 mientras venia en el coche, lo dijeron en las noticias de la radio, y sentí que una extraña y bonita sensación me invadía.
Esta sensación se debía al significado que yo le doy a la poesía, y también pienso en la multitud de significados que la gente que le puede dar a la poesía, increible y maravilloso.
POESÍA, siempre va a ser algo especial para mi, de hecho, me empezó a gustar la poesía en segundo de bachillerato, en las clases de lengua y literatura, con ese profesor, medio loco, al que también le encantaba la poesía, y en general la literatura, mas que los sintagmas y los tiempos verbales...es mas, no recuerdo que nos preparara demasiado para selectividad, algo que agradezco, porque yo disfrutaba con sus clases, y al acabar cada clase, siempre me recordaba que no seria la última, y que durante esa semana habia otra clase de literatura.
No solo es especial para mi la poesía, por las clases de literatura, también por mi ese 'alguien', gracias al cual descubri como se pueden entrelazar los sentimientos y las emociones de mi corazón, convirtiéndolas en versos que se atrevian a contarme cómo me siento, algo que era incapaz de asumir por mi misma.
Me gusta recordarlo así, y no como el amor imposible adolescente. Prefiero que sea así,una historia con un punto y final , y no como la historia interminable e imposible, que viene y se va por parte de los dos, cuando a cada uno le da un ataque de melancolía.
Por último, me gustaria recordar la definición que Juan Ramón Jiménez le dio a la poesía, más bien su percepcion personal de etsa, poema que descubrí en el libro de Lengua Castellana y Literatura (lo que sí, es que hay que saber leer este poema, para no escandalizarse) :
Desnuda
Vino, primero pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.
Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando, sin saberlo.
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando, sin saberlo.
llegó a ser una reina,
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracunda de yel y sin sentido!
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracunda de yel y sin sentido!
...Mas se fue desnudando.
Y yo le sonreía.
Y yo le sonreía.
Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.
Y se quitó la túnica,
y apareció desnuda toda...
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
y apareció desnuda toda...
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
Juan Ramón Jiménez.
